22 Abr

El ejercicio físico y su importancia para prevenir el cáncer de colon

Si se hace un análisis sobre el perfil del paciente con cáncer de colon encontramos como los hábitos vitales son factores que inciden de manera importante en la aparición de esta enfermedad. Mantener una alimentación, evitar el tabaco y el alcohol y realizar ejercicio de manera rutinaria pueden ayudarnos a prevenir la aparición del cáncer de colon.

Diversos estudios establecen como el ejercicio demuestran como el ejercicio físico inhiben el crecimiento de las células cancerígenas. La dieta sana y el ejercicio regular son armas perfectas para prevenir el cáncer de colon, para mejorar el tratamiento en caso de padecerlo o para evitar que se vuelva a reproducir. La actividad física consigue grandes efectos en nuestro organismo.

Un estudio llevado a cabo por investigadores de la Universidad de Queensland en colaboración con la Universidad de Waterloo relacionó la actividad física intermitente con la reducción en la velocidad en la que se reproduce el cáncer colorrectal. El esfuerzo físico parece afectar directamente a la evolución de esta dolencia debido a la inflamación producida en la zona.

Estos estudios son sólo preliminares y aún queda por establecer la relación directa que causa tal efecto. Además, se ha percibido que desaparece pasado un tiempo. Lo que si evidencia es cómo afecta el ejercicio físico a la prevención del cáncer de colón.

La práctica regular de ejercicio físico previene la aparición del cáncer de colon

Aunque este estudio está relacionado con la práctica de ejercicio de alta intensidad, la OMS recomienda la realización de actividad física moderada al menos dos horas y media a la semana para conseguir el consiguiente beneficio para nuestro organismo.

Otros estudios también realizados de manera masiva también establecen como las personas activas físicamente cuentan con hasta un riesgo menor de hasta un 50 por ciento de padecer cáncer. Como ya hemos indicado aún queda por establecer la relación directa más allá de los datos estadísticos que configuran el perfil del paciente de cáncer de colon.

Como posibles causas que hacen que el ejercicio físico favorezca la prevención del cáncer de colon podemos señalar la reducción de concentración de hormonas, la mejora del sistema inmunitario y alteración del metabolismo de los ácidos biliares.

Otros motivos pueden ser la reducción de los efectos nocivos de la obesidad, creando resistencia a la insulina de las células de nuestro organismo, y la reducción del tiempo de los alimentos en el tubo gastrointestinal evitando el contacto excesivo con carcinógenos.

Investigadores como Kathleen Y. Wolin establecen relación entre el tiempo dedicado a la realización de ejercicio físico observando una disminución considerada de padecer cáncer de colon cuantas más horas de actividad moderada se practiquen. Actividades como andar a cierta velocidad puede ser suficiente para conseguir estos efectos.

Según el estudio realizado por esta investigadora para las mujeres que practicaban al menos 4 horas de ejercicio físico a la semana el riesgo de padecer cáncer de colon se reducía hasta un 49 por ciento.

El ejercicio también se relaciona con una alimentación sana y con la ingesta calórica adecuada. Además, se recomienda especialmente practicar actividad física al aire libre para favorecer la absorción de la vitamina D que ayuda a reprimir la acción de la proteína beta-catenina evitando el crecimiento excesivamente agresivo de los tumores.

Las investigaciones sobre el beneficioso efecto del ejercicio físico para la prevención del cáncer de colon son bastante recientes y requieren aún bastante desarrollo. Pero los datos parecen ser bastante indicativos de que es un recurso a tener en cuenta para combatir esta enfermedad como parte importante de una vida con hábitos saludables.